martes, 24 de agosto de 2010

Historia interminable

Ingenuidades subestimadas, atrocidades sobrevaloradas
Gran resplandor, la protección de un poderoso objeto; amuleto
Gran dolor, el ver tu imagen clavada
Tú señora de los deseos. Hiciste ir por mi arriesgando la vida de miles de seres para involucrarme en una aventura imaginaria
Tú la de los ojos dorados. Me hechizaste y me hiciste creer en fantasías, en mi mismo
Tú hija de la luna. Vives en otro mundo, más allá de cualquier frontera, más allá de cielos y estrellas
Cruel, dulce e imaginaria; siempre es sólo un momento

1 comentario:

  1. que buen texto mito, me acorde de un señor que conocí en veracruz que me dijo: "¿sabes por qué traigo esto?" (saca un amuleto, un jade muy bonito con una llave)y le respondo: no, no sé.
    y me dice: "si me llega a pasar algo el jade se asegurara de que me permitan entrar al inframundo" y le pregunte: ¿y la llave? y me dijo: "esa es para entrar a casa" hahaha... espero que el momento sea más dulce e imaginario que cruel
    saludos amiguito bloggero, me actualizaré en tu blog :)

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